un gallinero eficiente y productivo durante todo el año
Las gallinas son extremadamente sensibles al calor, y el estrés térmico puede afectar gravemente su producción de huevos, crecimiento y bienestar. Por ello, la climatización evaporativa es una solución clave para mantener una producción estable y eficiente.
Las altas temperaturas reducen la postura y afectan la calidad del huevo. Un ambiente térmicamente controlado asegura una producción continua y de calidad.
Mayor producción de huevos
Menos mortalidad
Mejor conversión alimenticia
Reducción de enfermedades respiratorias
Mayor bienesta
El estrés térmico puede provocar la muerte de las aves, especialmente en pollos de engorde. Una buena climatización reduce la mortalidad hasta en un 99%. Una buena circulación de aire y reducción de la humedad minimiza la proliferación de patógenos, evitando enfermedades pulmonares.
Un ambiente reconfortante mejora el comportamiento de las aves, evitando episodios de estrés y agresividad dentro del gallinero